Era se una vez un pájaro que vivía con su familia en un nido muy acogedor. Se llamaba Marco. Marco tiene un hermano, que se llamaba Peter. Peter, cuando era pequeño, se fue de aventura al valle de los sueños.
Un día la madre de Marco, le dijo:
-No vayas nunca al valle de los sueños, es muy peligroso, que tu hermano haya ido no significa que tu puedas ir.
Y como siempre Marco, le respondía:
-Mamá, esto ya me lo has dicho muchas veces, me da miedo el valle de los sueños. Nunca voy a ir.
-Esta bien hijo, ya me quedo mas tranquila.
Pero siempre se lo repetía, hasta un día que no se lo dijo.
Tres meses mas tarde, Marco se levantó y su familia no estaba. Los buscó hasta llegar la frontera de su reino y lo que vio no le gustó nada, unos alcones se llevaban a su familia.
Marco salió en su busca y tras siete semanas viajando llegó al valle de los sueños y vio que estaban de fiesta, pero... ¿Por qué? Marco vio que su familia iba hacia él.
-¿Estás bien, mi pequeño Marco?
-Sí...¿Qué ha pasado?
-Te hemos engañado para que vinieras hasta aquí. Ahora lo que importa es volver a casa.
Y así hicieron, volvieron a casa y todo volvió a la normalidad y a que no adivináis que pájaro es Marco, es un... ¡Loro! Un bonito loro de plumas azules.
Otro día, Marco conoció una loro hembra y se enamoró de ella, se llamaba Claudia y era de plumas rosas.
Claudia también, se enamoró de Marco, pero no se atrevía a decírselo.
Un día Marco se atrevió a decir lo que sentía por ella, pero ella no, es más, salió corriendo y llorando de alegría.
Los dos se casaron y tuvieron loritos llamados:
Paula, Daniella, Circo, Emma y Cristian.
autora: Alba Martín de la Iglesia