miércoles, 27 de noviembre de 2013

MAELAI

Era se una vez una princesa llamada Avril que estaba cansada de ser una princesa porque ella quería ser buscadora de tesoros en una isla desierta en la que también pudiera ser pirata y recoger cocos.
Hace unos años por su cumpleaños le regalaron una gran bola del mundo, ella pensó que no le iba a servir para nada, hasta hoy. Cogió un cuchillo jamonero, se tapó las ojos y se puso a rodar la bola del mundo y le clavó el cuchillo en una isla que se llamaba Maelai.
Estuvo preparando su maleta con miles de cosas para poder sobrevivir en esa isla en la que nunca se había oído hablar de ella hasta ese día.
Después de haber preparado todo lo que le hacía falta, decidió escribir una carta para sus padres diciendoles que se iba para no volver en muchisísisisisimos años.
Cogío su jet privado, de un color rosa chicle y se fue en busca de esa isla.
Mientras que estaba de camino encontró en una isla remota a un chico llamado Izan. Después de recogerlo de esa isla le dió de comer, de beber, le lavó la ropa, le dio ropa nueva y le afeitó y lo echó a la cama para que pudiera descansar.
Aunque ella quería ir sola a vivir a esa isla, no le dió mucha importancia que Izan la acompañase, ya que a Avril le gustaba Izan.
Cuando llegaron a la isla se pusieron a buscar tesoros y a recolectar cocos para poder desayunar al dia siguiente.
Al terminar las tareas, decidieron que vivirían en  el jet, como si fuera su casa ya que si construian una cabaña con hojas y madera de la isla se empaparian por las lluvias.
Tras un año y medio viviendo juntos en la isla, Izan le pidió salir a Avril y ella aceptó y en poco tiempo ella se quedó embarazada.
Hasta hoy, ellos han sido muy felices en la isla con sus mellizos y fueron casados por los mandriles de la isla.
                                                            FIN  




                                                       Aida M.  & María Elena F.